PIDO PERMISO, SEÑORES

Pido permiso, señores.

Pido permiso para decir, humildemente, intentando que nadie se ofenda, como de soslayo, que Riquelme juega bien al fútbol.

Pido permiso para decirlo. Y lo hago sin énfasis alguno, en voz baja, susurrando, porque parece ser que a muchos les agarra fobia cuando alguien sostiene que Riquelme juega bien.

De algún modo uno debe someterse a las personas inteligentes y Alejandro Dolina pertenece a esa especie casi extinta en los medios.

Respiré aliviado cuando lo escuché decir que para él Riquelme era el mejor. Ya se me estaba convirtiendo en una pesada culpa ese pensamiento tortuoso acerca del talento de Román.

UN SUEÑO

Una noche tuve una pesadilla.

Yo caminaba por una calle oscura y me cruzaba con un señor grandote, un enajenado del micrófono que ha tenido más suerte de la que su capacidad merecía, un gritón malopinador de fútbol, una de esas personas insoportables que meten al fútbol en los lugares donde el fútbol no va (si hay una conversación de literatura y alguien nombra el apellido Schopenhauer, él dirá que era el 3 de Dinamarca en el Mundial de México).

Bueno, me cruzo con el tipo. Me mira fijo y me reprende con ferocidad: "A vos te gusta Riquelmeeeeee". Y sin decir "agua va" me encaja una trompada.

Sin dudas, ese sueño fue un "resto diurno". Porque después de escuchar un par de minutos a este muchachote hablar de Riquelme me daba la sensación de que el tipo terminaba de decir eso y salía a la calle a romperle el alma a todos los que denotaran algún gusto por el juego del conductor de la Selección.

Claro que uno quiere que todos vean el mundo como lo ve uno y acepto que al disfrutar del fútbol de Riquelme me pierdo algunos otros goces futboleros, pero no me da para descalificar a los que ven distinto las cosas.

Si te gusta mucho Messi, te felicito. Disfrutá de esa magia inconmensurable que mis ojos se obstinan en no ver aún.

Si te gusta Verón, adelante.

Si te gusta Mascherano, bien está.

Si te gusta Zanetti, dale nomás.

Y si te gusta el 4 de Chacarita, también está perfecto.

Yo vi jugar a Maradona (el gran océano del fútbol del Mundo, en el que Pelé es un importante mar, Cruyff un enorme río, Messi todavía un arroyo y Ronaldinho el agüita del cordón de la vereda).

Me gustaba ver jugar a Marangoni, a Francescoli, a Alonso, a Bochini, a Olarticoechea, al Búfalo Funes, a Borghi, a Clausen ... y me gusta ver como juega Riquelme.

Lo confieso.

Espero que los dueños de la opinión en el fútbol no me hagan rezar más de doscientos padrenuestros.

Marcelo Mármol De Moura